Primero fue un celular mejicano. En el 2005 más o menos, uno yanqui creo. En el 2009, uno brasilero, que anoche se me cayó y se rompió.
Hoy compré uno que lleva una leyenda, un sticker: “Hecho en Tierra del Fuego. Argentina”. Con un manual que dice “Impreso en Argentina”. Fue raro abrir esta caja. Siempre eran de afuera, con numerosas palabras en inglés.
Es por la ley que los medios como Clarín y La Nación, llamaban “el impuestazo tecnológico”.
Infobae profesional, por ejemplo, publicaba en 2009:
"Celulares, cámaras y artículos electrónicos más caros
El proyecto, en caso que sea finalmente sancionado por el Congreso impactará, especialmente, en el mercado de la telefonía móvil, que a pesar de la crisis mantiene apreciables tasas de crecimiento.
Según el último informe de la consultora Investigaciones Económicas Sectoriales (IES), la telefonía celular aumentó casi un 15% por ciento en el primer semestre del año respecto del mismo período de 2008.
La cantidad de líneas habilitadas en el país creció 6%, al alcanzar las 49,2 millones. Los precios de los celulares, GPS, cámaras digitales y otros artículos electrónicos aumentarán más de un 30%, si se aprueba finalmente el proyecto de ley enviado por el Gobierno nacional."
En fin, la ley se aprobó. Y ya hay compañías de las grandes que están radicando unidades de producción en Tierra del Fuego. Y argentinos comprando aparatos fabricados (aunque sea algunas de sus partes), acá.
Emociona el patriotismo de nuestros principales medios.
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